Desde que el Gobierno de Gustavo Petro presentó el proyecto de Presupuesto General de la Nación 2025, que asciende a $523 billones, no ha parado el debate pues lo expertos afirman que está desfinanciado. Ante esto, se volvió a plantear la necesidad de introducir otra reforma tributaria.

El Ministerio de Hacienda proyecta que los ingresos tributarios alcanzarían los $316,5 billones, cifra que supera en $26,6 billones lo estipulado en el marco fiscal de mediano plazo.

¿Aprobación del Presupuesto General de la Nación 2025 por decreto?

 El Congreso tiene hasta el viernes 13 de septiembre para definir la cifra del Presupuesto General de la Nación (PGN) de 2025, que será la base para debatir el proyecto final antes del 20 de octubre. La propuesta del Gobierno estima $523 billones, incluyendo $12 billones que provendrían de una reforma tributaria.

Varios congresistas, entre quienes está Efraín Cepeda, presidente del Senado, han mostrado su oposición a este monto, sugiriendo una reducción a $511 billones. De hecho, 30 congresistas radicaron una proposición pidiendo este recorte.

Cepeda expresó en su cuenta de X que el Congreso espera una propuesta que se pueda debatir con responsabilidad, sin incluir los $12 billones de una reforma tributaria que aún no ha sido discutida. Recalcó que no hay votos para aprobar estos recursos sin una revisión adecuada.

Ante la posibilidad de que el Congreso no dé luz verde al presupuesto, el presidente Gustavo Petro mencionó la posibilidad de expedir el PGN por decreto. En un mensaje compartido el 9 de septiembre, Petro señaló la paradoja de que las comisiones económicas no quieran aprobar el presupuesto debido a la falta de acuerdo con la ley de financiamiento.

Si bien la Constitución permite al Ejecutivo tomar esta medida, es poco común que se aplique, ya que la vía legislativa brinda mayor legitimidad al presupuesto, permitiendo a los congresistas hacer ajustes. En cambio, un decreto limitaría el proceso a una decisión unilateral del Ejecutivo.

Opiniones sobre el presupuesto General de la Nación

Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, advirtió sobre la incertidumbre de los ingresos adicionales proyectados en el Presupuesto General de la Nación, pues $12 billones dependen de una reforma tributaria que podría frenar la recuperación económica. Además, señaló que otros $14,6 billones no tienen una fuente clara.

Por su parte, Bruce Mac Master, presidente de la Andi, indicó que la propuesta afectaría el empleo, pues aumentaría el desempleo en 0,38 puntos y reduciría la inversión en casi 2%. Según Mac Master, el verdadero motor de ingresos es un crecimiento económico sostenido, apoyado por estabilidad en seguridad energética, física y jurídica.

El debate del Presupuesto General de la Nación

El debate del Presupuesto General de la Nación 2025 sigue un cronograma apretado. El lunes 9 de septiembre, los ponentes y coordinadores se reunieron para ajustar los detalles del presupuesto. Al día siguiente, martes 10, los congresistas volvieron a encontrarse con algunos ministros clave, como los de Deporte, Minas y Energía, Comercio y Trabajo, con el objetivo de ajustar el proyecto.

La votación que estaba programada para el miércoles 11 de septiembre a las 9:00 a.m., contó la presencia del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, y del director del DNP, Alexander López. El Gobierno necesitaba la aprobación del monto esta semana, dado que el Congreso tiene hasta el 25 de septiembre para debatirlo en primera instancia.

Tras más de siete horas de debate, las comisiones económicas conjuntas del Senado y la Cámara rechazaron el presupuesto de 523 billones de pesos propuesto para 2025. Desde el inicio, los congresistas advirtieron que estaba desfinanciado.

Ni siquiera la propuesta de una ley de financiamiento, con la que el Gobierno busca cubrir los 12 billones faltantes, logró convencer a los legisladores para aprobar el plan de gastos.

¿Qué alternativas tiene el Presupuesto General de la Nación?

Si el Congreso no aprueba la propuesta o el tiempo se agota, el Presupuesto General aún tiene otras opciones. Según el artículo 348 de la Constitución, el Gobierno puede emitir un decreto de repetición, reduciendo gastos si lo considera necesario, respetando los cálculos de ingresos.

El Decreto 111 de 1996 indica que el Ejecutivo puede eliminar o fusionar empleos públicos, pero no modificar el presupuesto de inversión. Además, podría recurrir a créditos adicionales si no hay nuevas fuentes de ingresos. El decreto para el Presupuesto debe estar listo antes del 10 de diciembre.

Si el tiempo es insuficiente para aprobarlo, la propuesta del Gobierno entrará en vigor automáticamente, como establece la Constitución, en el artículo 348.

Presupuesto y regla fiscal

Henry Amorocho, especialista en Hacienda, Presupuesto y Finanzas Públicas y Tributación,  señala que el gobierno está concentrado en cumplir con la regla fiscal en 2025, enfocándose en honrar compromisos internacionales y mejorar el recaudo. No obstante, para combatir la evasión y elusión, es necesario establecer reglas claras en la reforma tributaria.

Amorocho también menciona que el déficit en cuenta corriente está disminuyendo, y el gobierno busca potenciar sectores como el turismo y la agricultura para aumentar ingresos. El Congreso tiene la responsabilidad de definir un presupuesto realista, garantizando que las apropiaciones y las rentas proyectadas cubran adecuadamente los gastos comprometidos, permitiendo así el cumplimiento de la regla fiscal.

¿Qué opciones tiene el Gobierno si no le aprueba el Presupuesto?

El Gobierno de Gustavo Petro está en un momento decisivo para su política económica. Tras presentar la ley de financiamiento, este miércoles las Comisiones Económicas del Congreso comenzarán a discutir y votar el Presupuesto General de la Nación 2025. Se espera que la votación final del presupuesto se realice antes del 13 de septiembre, y el Congreso debe aprobarlo definitivamente antes del 20 de octubre.

Petro ha advertido que, si el Congreso obstaculiza el plan de gastos, no descarta expedir el presupuesto por decreto, una opción que la Constitución le permite si no se alcanza un acuerdo.

¿Y si la ley de financiamiento no avanza?

El Presupuesto General de la Nación puede aprobarse incluso si la ley de financiamiento no está completamente definida o se encuentra en modificaciones. Según el artículo 347 de la Constitución, si la ley no se aprueba o se retrasa, su discusión puede continuar en el siguiente periodo legislativo.

Si el presupuesto es aprobado, pero la ley de financiamiento sigue en trámite, el Gobierno tiene la facultad de suspender los gastos sin respaldo financiero a través de un decreto, hasta que el Congreso llegue a una decisión final.