La desigualdad económica constituye uno de los problemas de un modelo económico que impide que las mujeres ocupen empleos de calidad y mejor remunerados. Al no existir sistemas estatales de cuidado, obliga a las mujeres a seguir llevando la carga de trabajo de cuidados no remunerado y limita su capacidad económica. Por ello, los gobiernos deben poner en marcha medidas económicas con enfoque de género, sistemas tributarios y laborales más equitativos, sistemas estatales de cuidado, entre otras.
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