El Ministerio Agrario y Riego del Perú (Midagri) ha anunciado que las exportaciones de arroz hacia Colombia podrían llegar a las 100.000 toneladas anuales, gracias al levantamiento de las restricciones impuestas por el gobierno colombiano para importar este cereal desde hace cerca de 20 años.
Entre julio y agosto del 2022, Perú exportó hacia Colombia 5.595 toneladas de arroz. Y entre septiembre y noviembre del mismo año, exportó otras 13.246 toneladas, según cifras del Midagri.
La noticia de la masiva importación del cereal es otro golpe para los arroceros colombianos y sus familias que vienen siendo golpeados año tras año en favor de los arroceros extranjeros.
Cifras del MinComercio indican que en 2020 Colombia importó 279.048 toneladas de arroz (‘paddy’, pardo, semiblanqueado y blanqueado, entre otros tipos). Al comparar esta cifra con la de 2010, se obtiene un incremento de las importaciones del 4.331 %.
El TLC con Estados Unidos uno de los culpables de la crisis arrocera
Antes del TLC, Estados Unidos exportaba a Colombia cerca de US$5 millones anuales en arroz, pero según datos del Departamento de Comercio de los Estados Unidos, en el 2014, y después de entrar en vigor el TLC, ese país ingresó US$62 millones y a julio de 2015 ya había exportado hacia Colombia US$132 millones en arroz.
Varios especialistas señalan que el sector arrocero colombiano necesita mayor apoyo de parte del Estado y ser competitivo para que se pueda desarrollar a la altura de las necesidades del país y de la necesidad de recuperar las grandes áreas de cultivo perdidas en años anteriores por culpa de pésimas políticas agrarias y de tratados comerciales como los TLC.
El futuro para los arroceros colombianos es mucho más oscuro si se tiene en cuenta que dentro de poco entrará en vigor el arancel cero a todas las importaciones de arroz provenientes de Estados Unidos, de acuerdo con el Tratado de Libre Comercio (TLC) firmado por Colombia con ese país.
A lo anterior se suma el informe de Fedesarrollo y la Cámara Induarroz de la Andi titulado “¿Cómo lograr un sector arrocero competitivo para 2030?”, en el que se señala que para el 2030 Colombia perderá el 39 % del sector arrocero, refiriéndose al área sembrada.
