La producción industrial bajó en septiembre, las ventas se mantienen en terreno positivo, la utilización de la capacidad instalada mejoró y los inventarios han cedido.
En este contexto, vemos favorable las medidas que ha adoptado el gobierno en materia de competitividad, entre las que se destacan la reciente reglamentación de la reforma tributaria, que bajó la retención a 2.5%, y que en los meses de noviembre y diciembre será de 1.5%, dándoles una mayor liquidez a las empresas.
Asimismo, el panorama de las concesiones se ha venido despejando, lo que estimulará la inversión en infraestructura. Este es un primer paso y debemos seguir trabajando en medidas de corto plazo, transversales, sectoriales y regionales y sobretodo no perder de vista la agenda de competitividad de largo plazo.
Si bien el panorama manufacturero no ha logrado despejarse, posiblemente en el último trimestre del año el desempeño comenzará a mejorar. Lo anterior se desprende de la relativa mejoría en inventarios, el clima de negocios menos complejo, los factores estacionales de fin de año y el impacto de las medidas adoptadas por el gobierno.
Producción y Ventas
De acuerdo con los resultados de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (EOIC), que la ANDI realiza con ACICAM, ACOPLASTICOS, ANDIGRAF, ANFALIT, CAMACOL y la Cámara Colombiana del Libro, en el período enero-septiembre de 2013, comparado con el mismo período de 2012, la producción disminuyó -0.7%, las ventas totales aumentaron 0.9% y, dentro de éstas, las ventas hacia el mercado interno crecieron 1.5%.
Utilización de la Capacidad Instalada
En septiembre de 2013 el indicador de uso de la capacidad instalada se situó en 78.5%, nivel levemente superior al observado en el mismo mes del año anterior (78%).
Inventarios y Pedidos
Los indicadores de demanda (inventarios y pedidos) se mantienen por encima del promedio histórico y reflejan una tendencia similar a la observada un año atrás. En efecto, el 82.0% de la producción calificó sus pedidos como altos o normales, frente a un indicador de 82.2% en septiembre de 2012.
Por su parte, el porcentaje de la producción que califica sus inventarios como altos fue de 27.7%, nivel superior al observado en el mismo mes del año anterior cuando llegaba a 22.9%, pero menor al registrado en el mes de agosto (36%), cuando este porcentaje se vio afectado por los paros.
Clima de Negocios y Obstáculos para la actividad productiva
El clima de los negocios también captura las dificultades de la industria manufacturera en la coyuntura más reciente. Es así como el 56.6% de los encuestados califica la situación actual de la empresa como buena, nivel inferior en casi tres puntos al reportado un año atrás (59.3%). Por su parte, las mejores expectativas son reportadas por el 40.6% de las empresas, mostrando una mejoría frente al 34.7% observado en septiembre de 2012.
Los principales obstáculos que perciben los empresarios en el desarrollo normal de su actividad son en su orden: baja demanda, alta competencia en el mercado, tipo de cambio, costo y suministro de materias primas, infraestructura y costos logísticos, contrabando, bajos márgenes de rentabilidad, problemas con la mano de obra y falta de capital de trabajo.
Costos de transporte terrestre
Como se anotó anteriormente, los costos de transporte y logística están entre las principales dificultades del sector productivo. Por ello, en la EOIC de septiembre, incluimos unas preguntas especiales sobre este tema.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta, los costos logísticos representaron en promedio el 13.3% del total de los costos de producción y el 7.6% de las ventas de las empresas en 2012, motivo por el cual el tema de costos de transporte hace parte fundamental de la política de competitividad del país.
Anteriormente, con el uso de la tabla de fletes no había incentivos para la eficiencia en la cadena de transporte. Por esta razón, en febrero de 2010 surgió la política de libertad vigilada que privilegia la formación de tarifas de manera libre de acuerdo a las condiciones de mercado. Se les preguntó a los empresarios si la política de libertad vigilada de negociación de fletes de transporte de carga por carretera, ha significado una mejoría en la competitividad de la empresa, el 41.4% respondió afirmativamente y el 58.6% negativamente.
Para las empresas que respondieron afirmativamente, esta política ha generado una disminución en el valor de los fletes (25.7%), la posibilidad de negociar libremente (21.6%), mayor estabilidad en los precios (18.9%), mayor eficiencia y calidad en los servicios (17.6%), y mejores prácticas de negociación de fletes (16.2%).
Mientras que las empresas que consideran que la política no les ha ayudado a ser más competitivas, indican que no se ha presentado una mejora en costos (35.3%), ni en la forma como se negocian los fletes (32.4%), y que la política no debería tener ningún tipo de regulación (11.8%).
Una vez implementada la política de libertad vigilada, se están afianzando las relaciones económicas de los actores de la cadena. Por esta razón, cerca del 50% de los empresarios cuenta con acuerdos operativos a largo plazo para contratar los servicios de empresas de transporte por carretera.
Aperturas de nuevos mercados y barreras para exportar
En la encuesta de septiembre también preguntamos a los empresarios temas relacionados con comercio exterior. Las empresas manifiestan que el 3.6% de sus exportaciones corresponden a nuevos productos que hace dos años no se exportaban, y el 9.9% diversificó los mercados a los que exporta. Se evidencia, de esta forma, que el empresariado colombiano está ampliando el portafolio de bienes exportables y al mismo tiempo está en búsqueda de abrir nuevos mercados.
La política de globalización e integración del país se traduce en una ampliación de mercados y nuevas oportunidades, pero también significa grandes retos en productividad y competitividad y así los manifiestan los industriales.
Los empresarios consideran que las principales dificultades para exportar y aprovechar plenamente los acuerdos comerciales firmados por el país son: Competitividad del país, costos logísticos, infraestructura, fletes, cumplimiento de normas, tipo de cambio, costos de materias primas, costos energéticos, alta competencia de mercados externos, entre otros.