Pacific Rubiales Energy, una petrolera canadiense que opera en Colombia desde 2008, ha propuesto que si el Estado prorroga el contrato del campo Rubiales, el principal campo de la empresa con más de 190.000 barriles al día, aplicará el proyecto STAR (Synchronyzed Thermal Additional Recovery).
Para Mario Alejandro Valencia, subdirector de Cedetrabajo y autor del estudio: política minero-energética: análisis del caso Pacific Rubiales, publicado en mayo de 2013, el proyecto STAR ni es novedoso, ni es exclusivo ni le conviene al país. Lo único novedoso en el proyecto es el nombre, pues la tecnología existe hace más de dos décadas y es el último recurso utilizado por petroleras en el mundo para aumentar el recobro en la extracción, cuando otros procesos a través de la inyección de agua o gas han fracasado.
El proyecto STAR no es más que el conocido método de combustión In Situ, que consiste en inyectar calor al pozo, quemando parte del petróleo al interior y produciendo un desplazamiento del mismo hacia los pozos de extracción. Con este método, según Valencia, la empresa aumenta su producción a cambio de que los colombianos perdemos entre un 10 y un 20 por ciento del petróleo que se quema con el proceso.
Así mismo, denunció que a pesar que el proyecto no está en funcionamiento y no está ubicado en el campo Rubiales sino en el bloque Quifa, Pacific ya recibe un incentivo fiscal por las inversiones en investigación y desarrollo, consistente en la deducción del 75% de la inversión y la posibilidad de depreciar totalmente los activos en el primer año, según lo informó la misma empresa en su Reporte Anual de 2012.
Pacific Rubiales está interesada en prorrogar el contrato del campo Rubiales porque le significa el 80% de su producción petrolera en Colombia, y este país representa el 98.7% de su producción total. A pesar de esto, ni una sola empresa de las 23 que conforman el conglomerado Pacific Rubiales Energy Corp, está registrada en Colombia, sino en reconocidos paraísos fiscales.