Entre los países miembros de la OCDE, Colombia ocupa el segundo puesto con el mayor número de “ninis”, jóvenes que ni estudian ni trabajan.
En el último informe realizado por La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Colombia es solo superado por Turquía en el número de “ninis” con un 28,7 %. Una diferencia porcentual del 1,6 % con respecto al 27,7 % de Colombia.
Frente a los países de América Latina que hacen parte de la OCDE, Colombia ocupa el deshonroso primer lugar.
Según la medición, Costa Rica tiene un porcentaje de “ninis” del 25,9 % y ocupa el cuarto lugar en la OCDE. Le sigue Chile en quinto lugar con un 23,4 % y cierra México en el sétimo lugar con un 20,9 %.
Los “ninis” no dejan de aumentar en Colombia y su porcentaje se incrementa con el tiempo. En el 2015, según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) titulado “Empleos para crecer”, en el país había un porcentaje del 24 % de “ninis”, un 3,7 % menos a lo que registra hoy la OCDE.
Una dura realidad
Las y los jóvenes colombianos no encuentran opciones laborales reales y el sistema educativo del país es débil, la deserción es alta y no ofrece alternativas.
Otros factores como los bajos ingresos, el aumento de la pobreza, el aislamiento en zonas rurales, el desplazamiento, la falta de políticas y estrategias publicas efectivas por parte del Gobierno Nacional afectan de manera directa vida laboral y educativa de las y los jóvenes colombianos.
El porcentaje de “ninis” no para de crecer en Colombia
El porcentaje de jóvenes que ni estudian ni trabajan en Colombia, conocidos como “ninis”, era del 24 % en el 2015, según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo.
Hoy el porcentaje es del 27,7 %. Lo que coloca a Colombia en el deshonroso 2do lugar entre los países miembros de la OCDE con más de “ninis” y el 1er puesto entre los países de América Latina que hacen parte de esa institución.
La falta de políticas y estrategias públicas efectivas por parte del Gobierno Nacional golpea con fuerza el futuro de millones de jóvenes colombianos que no encuentran opciones laborales reales y que muchas veces no pueden acceder a un sistema educativo que ofrece pocas alternativas.
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